Tu PS5 es una bestia, sí. Pero incluso las bestias se cansan si las tratas mal.
A veces, por pereza o simple desconocimiento, cometemos errores que parecen tonterías pero que, a la larga, pasan factura. Si notas que tu consola va más lenta, los tiempos de carga se eternizan o tienes errores raros al actualizar, es probable que estés cayendo en uno de estos tres errores.
Vamos a ser muy honestos contigo, y es que si sigues haciendo esto, vas a tener problemas.
1. El síndrome de Diógenes Digital (Llenar el disco de tu PS5 al 100%)
Todos sabemos que la caja dice «1 Tera», pero la realidad es que solo tienes unos 800 GB reales para tus juegos. Y con lo que pesan los títulos de hoy (te estamos mirando a ti, Call of Duty), es muy fácil llegar al límite.
El error: Llevar el almacenamiento al tope.
¿Por qué es peligroso? Pues cuando tu SSD está a reventar, la consola se «ahoga». Lo que quiere decir, que no tiene espacio para maniobrar con archivos temporales.
- Consecuencias: Te comenzarán a aparecer tirones en los juegos, texturas que no cargan, tiempos de carga eternos e incluso problemas reproduciendo video.
La solución que desde Pleyx te damos, es que: No seas acumulador. Si no lo juegas, bórralo. Deja siempre un margen de espacio libre para que el sistema respire. Y si de verdad necesitas guardar todo, invierte en un SSD compatible (y certificado) para expandir memoria, no satures el principal.
2. La Ruleta Rusa con tu disco externo
Si usas un SSD o HDD externo para tus juegos de PS4, nunca desconectes el cable «a lo bruto».
Sabemos que tienes prisa, pero arrancar el cable sin usar la opción de «Expulsar USB» es la forma más rápida de corromper tus datos. Imagina perder 500GB de juegos y tener que volver a descargarlos con tu conexión de internet. ¿Duele, verdad?
Entonces, usa siempre la opción del menú. Son 5 segundos que te ahorran 5 horas de descarga.

3. El abuso del «Modo Reposo»
Aquí es donde muchos gamers se dividen, pero la lógica (y la ciencia) no mienten.
El Modo Reposo es genial para descargar parches o cargar el mando un rato. Pero hay gente que deja la consola así semanas enteras sin apagarla jamás.
Y es que la realidad incómoda, porque aunque Sony diga que «está optimizada», dejar componentes electrónicos con corriente pasando 24/7 genera desgaste.
- Límite recomendado: No más de 8 horas seguidas.
- El riesgo: Errores de caché acumulados, fallos en actualizaciones de sistema y un desgaste prematuro de la fuente y la placa por calor residual constante.
A menos que estés descargando algo pesado o cargando el DualSense, apaga tu consola completamente. Dale un descanso real.

Tu PS5 no debería ser un misterio: Pásate a PLEY
Sabemos lo que piensas: «¿Realmente estoy cuidando mi consola o solo esperando a que falle?». La incertidumbre sobre el sobrecalentamiento o el desgaste silencioso se acaba hoy mismo.
Porque hemos creado PLEYX App con un solo objetivo, y es que tú te concentres en la partida y nosotros nos encarguemos de blindar tu inversión. Pleyx actúa como el «cerebro externo» de tu PS5, monitoreando y gestionando lo que no se ve a simple vista.
¿Cómo te protege PLEYX del desastre?
- Nunca más «Disco al 100%»: Llenar el almacenamiento al límite no solo impide instalar juegos, sino que fragmenta y ralentiza el sistema operativo. Pleyx te ayuda a gestionar tu espacio digital para que tu consola respire y rinda siempre a máxima velocidad.
- Dominio Total del SSD: ¿Necesitas más espacio? No adivines ni compres a ciegas. Nuestro asistente Pleyx GPT te dice exactamente qué SSD M.2 es compatible, cómo instalarlo y cómo optimizarlo para que tu biblioteca de juegos crezca sin riesgos técnicos.
- Fin al Abuso del «Modo Reposo»: Dejar la consola «dormida» indefinidamente es un asesino silencioso de componentes. Nuestra suite de mantenimiento te alerta sobre el abuso del reposo y te guía para gestionar ciclos de energía sanos que extiendan la vida útil de tu máquina.
Entonces, tu PS5 no es una cafetera. Es una bestia de rendimiento. Así que trátala con el respeto (y la potencia) que se merece con PLEYX.
Únete a la Resistencia y apúntate a la lista de espera.